martes, 21 de abril de 2015

PENSAMIENTO VIVIENTE. ORIGEN Y ACTUALIDAD DE LA FILOSOFÍA ITALIANA

Pensamiento viviente. Origen y actualidad de la filosofía italiana
(traducción junto a María Teresa D'Meza)








Nacida fuera del horizonte nacional y heterogénea respecto de los paradigmas canónicos de la razón moderna, la filosofía italiana parece gozar hoy de una fortuna creciente más allá de sus propias fronteras. A diferencia de otras culturas filosóficas, caracterizadas por la indagación sobre el sujeto o por la teoría del conocimiento, por el análisis del lenguaje o por la deconstrucción hermenéutica, se presenta desde el comienzo volcada hacia su exterior, expuesta a los conflictos y a los traumas de la experiencia mundana. En su centro se despliega la categoría de vida —excedente respecto de toda definición presupuesta—, en una relación siempre tensa y problemática con las de política e historia. Es precisamente esta materia densa y opaca, difícilmente reductible al orden formal de la representación, la que impulsa al pensamiento italiano en una sintonía profunda con las características constitutivas de nuestro tiempo. Antagonismo e inmanencia, origen y actualidad, comunidad y biopolítica, interrogadas en su génesis conceptual e impresas en el corazón de la contemporaneidad, son las polaridades en torno a las cuales, en un intenso debate con los mayores filósofos italianos de todos los tiempos, se articula el recorrido teórico original y elocuente de uno de los protagonistas del debate filosófico contemporáneo.

EL PODER QUE FRENA. ENSAYO DE TEOLOGÍA POLÍTICA

El poder que frena. Ensayo de teología política
(traducción junto a María Teresa D'Meza)





En la Segunda Epístola a los Tesalonicenses, que la tradición atribuía a San Pablo, aparece la enigmática figura de una potencia: el katékhon, algo o alguien que detiene y contiene, frenando el asalto del Anticristo, pero que deberá ser eliminado o quitado de en medio —a fin de que el Anticristo se manifieste— antes del día del Señor. Es la interpretación de esta figura, y el fondo sobre el que se desenvuelve, una reflexión general —en constante «acuerdo divergente» con la posición de Carl Schmitt— sobre la «teología política», y más aún sobre las formas en que ideas y símbolos escatológico-apocalípticos se han venido secularizando en la historia política de Occidente, hasta el actual olvido de sus orígenes.
¿Con qué sistema político pudo hallar un compromiso el paradójico monoteísmo cristiano y su fe en el Deus-Trinitas? ¿Con la forma del imperio, o con la de un poder que frena, contiene, administra y distribuye? ¿O se trataría, más bien, de una contaminación de las dos? No pocas de las decisiones políticas que han signado a nuestra civilización giran en torno a estas cuestiones, que en algunos de sus más grandes intérpretes, de Agustín a Dante y Dostoievski, han alcanzado una dramática representación.
Las reflexiones formuladas en este ensayo se completan con una antología de los pasajes más significativos de la tradición teológica, desde la primera patrística hasta Calvino, dedicados a la exégesis de la Segunda Epístola a los Tesalonicenses, 2, 6-12.